Caras desencajadas, puños crispados, miradas sobresaltadas, tono de voz elevado, habitos destructivos, etc. Todos estos calificativos que parecen salidos de un pabellon psiquiatrico, forman parte de la realidad cotidiana. Al estar inmersos en ella, cabalgamos sin quererlo en la "locura galopante"; un dicho de la zona, ya bastante viejo, que ha vuelto a salir a la luz. Si, asi es; si Ud que se encuentra en un estado de armonia y equilibrio permaneciera observando a la gente un rato, se daria cuenta de lo que hablo: la sociedad esta muy mal. Pero por suerte, tiene arreglo; todo depende de uno mismo, darse cuenta y trabajar en el cambio y crecimiento personal. La crisis que se ha instalado en el mundo estos ultimos meses, ha puesto en el tapete nuevamente las viejas heridas de la sociedad, entre ellas, la locura galopante; sindrome que mantendra muy ocupado a los sicologos y psiquiatras en estos tiempos. Por suerte, muchas personas estan a tiempo de cambiar de rumbo en la vida y asi evitar las concecuencias, hasta ahora mmitigadas por un puñado de medicamentos o pastillas que nada resuelven. Cambiar los habitos de vida es la salida para evitar este mal, lo invito a que lo intente, antes de que la locura galopante se lo lleve a Ud. puesto.
Mario Molinari.
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