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jueves, 29 de octubre de 2009

Isis - El Principio Femenino



Por Vivi Cervera

Las mitologías egipcias, africanas y griegas entre otras, nos muestran a la Tierra y a la Mujer como principio femenino al cual se le rendía culto por su capacidad, inteligencia y poder. En esta ocasión escogí a una de las diosas más importantes de la mitología egipcia, con el fin de recordar contigo el significado que tiene el hecho de ser mujer en este momento, así como en las culturas antiguas y a nivel multidimensional.

El nombre Isis, evoca el significado de la palabra “trono” y representa al poder, porque el rey se sentaba sobre el trono para gobernar, mientras la diosa lo protegía. En otras palabras, el rey se sentaba en la silla representada por la mujer, para ejercer su cargo ante la nación. Isis la diosa, hermana y esposa del rey Osiris, fue despojada del poder que le otorgó su esposo antes de irse de viaje, por envidias y celos de Seth (hermano de Osiris) por el hecho de que ella se quedaba al mando del pueblo egipcio. Posteriormente Osiris murió a manos de Seth.

La magia de Isis era tal, que por medio de sus artificios logró quitarle autonomía a Ra (el creador supremo), para así ser ella quien quedara a cargo del poder. Los monumentos a Isis y muchos de los jeroglíficos que la relacionaban con su influencia en el antiguo Egipto, fueron destruidos con la llegada del cristianismo, con lo cual la parte femenina contenida en los hombres se vio disminuida notoriamente, ocasionando el desequilibrio en la Tierra y sus habitantes, hasta nuestros días.

El ying (femenino) y el yang (masculino) son las dos partes de la polaridad. La Tierra, que continúa siendo el principio femenino y la Madre, contiene un exceso de yang que se deriva de los mitos, de la historia, de las vivencias de nuestros ancestros. Cuando la inquisición ordenó la ejecución de 9 millones de mujeres, también eliminó de cada hombre su parte ying, el amor por la Tierra, su conexión con la vida y su propio poder masculino.

El poder de la diosa/mujer es tan inmenso, que cuando un hombre puede reconocerlo y aceptarlo, automáticamente pasa a ser más poderoso que antes, más completo y pleno que siempre, porque cada hombre del planeta proviene de una mujer y por lo tanto su fin es encontrar el equilibrio entre las dos polaridades en su interior.

Cuando fue sometida, la mujer olvidó quién era y asumió que tenía que vivir con los problemas que generaba el desequilibrio interno de los seres humanos. Así es como en el pasado hubo muchas mujeres que desde la oscuridad de sus vidas daban a luz, hombres y mujeres, niños y niñas con evidentes problemas de poder. Es ahí donde nacen los conflictos de índole social, de salud, violencia, enfermedad y muerte que hemos heredado.

Actualmente las mujeres hemos empezado a aceptar quiénes somos realmente, estamos comprendiendo que una niña o un niño pueden disfrutar libremente de una muñeca, de una estufa o de un balón de fútbol, tan libremente como se quiera. Esto no pone en riesgo la integridad del ser humano, ni sus preferencias sexuales, ni determina su éxito. El considerar la posibilidad de que el equilibrio se forme con el blanco y el negro, con el día y la noche, con el sol y con la luna, es más una cuestión de lógica que del miedo histórico a no educar correctamente a los hombres y mujeres del mañana. Las mujeres tenemos la misión de cambiar y mejorar nuestro mundo interior para que las nuevas generaciones disfruten del equilibrio y de la plenitud.

Las mitologías con sus deidades son utilizadas actualmente como un método terapéutico que le permite al ser humano descubrir a su dios/diosa predominante para de este modo adoptar como propios, su esencia y su linaje. Cuando una mujer acepta su propio poder, cuando reconoce en sí misma las huellas de una diosa, logra elevarse sobre los recuerdos, sobre el dolor, sobre el miedo, logra elevarse por encima de lo que significa injusticia y finalmente puede amarse incondicionalmente, porque se encuentra preparada para alimentar nuevamente a la Tierra.

Este artículo ha sido escrito en honor de Isis, en honor de cada mujer y de todo aquello que contenga en su núcleo al principio femenino en este Universo. Feliz día de la mujer (que es cada día del año). Las amo.

Vivi Cervera. Copyright 2009. Derechos reservados de autor.

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